La segunda entrega de nuestra serie especial por el 25 aniversario del Civic Type R nos lleva a la séptima generación del Civic. Después de hablar del primer Type R en la figura del EK9, el segundo puede que no sea tan mítico, pero tiene un significado especial por haber sido el primero que se comercializase en Europa.
En 2001 se comienza a fabrica en Swindon (Reino Unido) el Honda Civic Type R EP3, siendo heredero de la mayoría de los atributos que hicieron grande a la primera generación: carrocería hatchback de tres puertas, motor atmosférico de giro alto y una puesta a punto deportiva y muy incisiva.
Pero como muchas otras veces, aquí no pudimos disfrutar de todas las mieles que ofrecía la versión japonesa de este nuevo Type R. Mientras que la variante JDM (Japanese Domestic Market) incorporaba el nuevo bloque de dos litros K20A con toda la lista de mejoras (mejores pistones, centralita, árboles de levas, colectores de admisión y escape…) que le hacía llegar a los 215 CV y 202 Nm de par, la versión EDM (European Domestic Market) llamada K20A2, prescindía de varias de esas mejoras y se quedaba en unos correctos 200 CV y 196 Nm.
En ambos casos, siguiendo con la tradición de los VTEC atmosféricos de Honda, las cifras máximas eran entregadas bien arriba, con esos 200 CV encontrados a 7400 rpm para la versión europea del Type R. Prometía un 0-100 en 6,6 segundos y 235 km/h de velocidad máxima, cifras de coche rápido hasta para el estándar actual.
El planteamiento técnico del EP3 lo completaba una suspensión convenientemente puesta a punto -con diferencias también entre Japón y Europa-, un diferencial autoblocante mecánico que tampoco llegó a nuestro continente, una caja de cambios de seis marchas y una frenada actualizada y de mayor tamaño, guardada sobre llanta 17”.
En el exterior, el Type R EP3 se diferenciaba con el kit básico de todo hot hatch; nuevos paragolpes más deportivos y taloneras específicas a los que se sumaban las ya clásicas pegatinas de Type R, insignias rojas y una doble salida de escape de verdad. Aunque transicionaba del diseño clásico del primero de dos volúmenes a una suerte de compacto monovolumenizado, propio de la fiebre por estas carrocerías de inicios de siglo, el resultado final era agradable y, rematado con ese alerón, honesto.
Abrías la puerta del segundo Type R y lo que verías en el habitáculo iba a depender, de nuevo, de si eras japonés o no. Mientras que aquí, ibas a ser recibido por dos asientos tipo semibucket de escaso atrevimiento cromático, en la versión JDM se mantenían los Recaro rojos y otros muchos detalles en ese mismo color. Presidiendo la consola central, el mítico pomo de titanio en posición extrañamente furgonetil pero con el mismo tacto delicioso de siempre.
En 2003, coincidiendo con el 30 aniversario de la producción del Civic, Honda obsequió al mundo con el Type R 30th Anniversary, una versión limitada a 300 unidades en Milano Red, Satin Silver o Nighthawk Black (100 de cada uno) y que conmemoraba este hito con detalles específicos y la inclusión de varios elementos del JDM a la versión europea.
Ya en 2004, el Type R sufriría un ligero rediseño que incorporaría nuevos paragolpes, faros, parrilla y algunos cambios de equipamiento. Se añadía una nueva dirección asistida eléctrica, se modificaba el tarado de la suspensión para hacer el coche más reactivo, después de recoger el feedback de clientes y prensa.
Así, en 2005 llegaríamos al final de la producción del Honda Civic Type R EP3. La versión europea Premier fue la encargada de cerrar el ciclo, con una combinación interior negro-rojo en moqueta y buckets Recaro que es, a mi gusto, la más elegante del Type R y que veríamos también en posteriores generaciones. Por si os lo estáis preguntando, un Type R costaba en España de aquella unos 26000€.
El primer Civic Type R europeo fue toda una revelación y un duro golpe a sus rivales en el segmento tan disputado de los compactos deportivos. Todavía puramente atmosférico, es ya un youngtimer de pleno derecho y un modelo cada vez más cotizado. Mientras buscas uno, te dejamos con unos minutos de Richard Hammond con él, allá por el Pleistoceno. ¡Menuda época!
¡Nos vemos en la siguiente entrega de la saga Civic Type R!
