En los años 80, muchas empresas de tuning estaban dispuestas a poner su emblema en cualquier coche de producción, para así, crear una edición especial, y McLaren (La compañía americana) no fue menos.

La historia comienza con Peter Muscat, un ingeniero que tuvo la idea cuando su mujer, una trabajadora de Ford, llegó con su Mercedes SL al parking de la empresa y no le dejaron aparcar. En 1982, convirtió un Mustang coupé de 1980 en un descapotable biplaza con un techo de lona. Al terminar el coche, lo enseñó a Ford, ya que tenían en sus planes hacer un Mustang descapotable para el modelo de 1983. Los directivos de Ford aconsejaron a Muscat que hablase con Lincoln-Mercury, ya que el Capri estaba reduciendo su número de ventas, y así, Lincoln-Mercury dio el visto bueno al proyecto.

Muscat contactó con ASC (American Specialty Cars), un carrocero conocido por hacer conversiones a descapotables, para producir una edición especial del Mercury Capri. Para ello ASC contactó con McLaren, una empresa estadounidense dedicada a la preparación de coches para que aportasen muelles, amortiguadores y llantas, además de trabajo en carrocería. 

Lo curioso de la historia: Comparte nombre con el famoso fabricante británico. Pero aclaramos que NO tiene relación.
ASC Mclaren Mercury Capri
ASC Mclaren Mercury Capri

Con el Capri acabando su producción, Ford invitó a Muscat y ASC a modificar el popular Mustang, esta vez, con total respaldo por parte de Ford, llegaron a un acuerdo de producir una versión ASC-McLaren del Mustang. El truco del asunto era que los concesionarios anunciaban el coche como "Mustang McLaren", de manera que diese lugar a confusión, en un momento idóneo, cuando la fiebre de la Formula 1 estaba en plena ascensión y así relacionasen un mundano Mustang con una todopoderosa escudería de monoplazas. La realidad era otra: El Ford Mustang ASC-McLaren era un coche demasiado caro para lo que ofrecía, con un precio de alrededor $20.000 ($45.000 contando inflación), y unos años en los que la economía titubeaba, hizo de este producto un fracaso.

Ford Mustang ASC-McLaren

En 1989, después de unos años de producción, una disputa entre Muscat y ASC, rompió su relación comercial. De esta colaboración, algo más de 1.800 unidades vendidas solamente entre 1984 y 1990.

El resultado: Muscat bajándose del proyecto, quedando la unión ASC-McLaren únicamente, por lo que empezaron a fijarse en otros modelos que le llamaron su atención. En este caso, el Pontiac Grand Prix.
Pontiac Grand Prix ASC-Mclaren Turbo
Pontiac Grand Prix ASC-Mclaren Turbo

Este Pontiac Grand Prix representa a la perfección la transición entre la década de los 80 y 90. Primero por su nombre oficial: Pontiac Grand Prix ASC-McLaren Turbo. Un nombre contundente, para recordar.

En papel, el Grand Prix era un coupé de tracción delantera en una conocida plataforma de General Motors, con un V6 de 3.1 litros de cubicaje y solamente 130 CV. Nada que resaltar a priori, pero Pontiac y ASC-McLaren llegaron a un acuerdo, y transformaron el Grand Prix con suspensiones mejoradas, carrocería ensanchada y un enorme turbo de la marca Garrett, estas modificaciones darían como resultado 205 CV y 305 Nm de par motor, una subida de potencia y par considerable, aunque todo tiene un precio; en este caso, algo caro para el coche que era: $5.000. 

Menos de 3.500 unidades del Pontiac Grand Prix Turbo ASC-McLaren fueron producidas, pero queda en el recuerdo una de esas colaboraciones que da lugar a error, pero que tampoco necesitan ninguna explicación. Puedes hacerte con uno de ellos para ir a concentraciones de superdeportivos de la marca británica, es un "McLaren" después de todo.


Publicado el 
24/9/2020
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Curiosidades