Mercedes SLK 55 AMG Black Series, el pionero (con sorpresa al final)

La gama de vehículos AMG de Mercedes, desde hace algún tiempo conocidos como Mercedes-AMG, siempre ha sabido aportar un maravilloso extra de picante a los modelos de Mercedes. Si aquí se nos cae la baba hablando de la división M de BMW, de los RS de Audi y de otros tantos más, no es menos con AMG y sus creaciones.

En este camino de deportividad que no parece tener fin (por suerte), la gente de Affalterbach se las ingenia para superarse con cierta periodicidad y obsequiarnos con versiones más deportivas, más brutas y más puras que los ya de por sí deportivos y brutos AMG "de serie". De esta filosofía nacen los Black Series, animales indómitos que beben de la herencia del motorsport y fieles a ella, tienen por dogma ser coupés biplazas de propulsión road-legal.

Mercedes SLK 55 AMG

Todo lo anterior se materializó por primera vez en el coche protagonista de esta semana, el Mercedes SLK 55 AMG Black Series. Partiendo de la plataforma SLK R171 y ya con el enorme V8 de 5.5 litros M113 metido a presión en el vano motor, el pequeño roadster AMG sufrió una serie de procesos traumáticos -que incluían la pérdida del techo duro retráctil- para convertirse en el pionero de una saga venerada.

SLK 55 AMG Black Series

Ayudó en este desarrollo la experiencia adquirida del SLK 55 AMG que actúo como Safety Car en la F1 durante 2004 y que ya incluía varios trucos extra. Así, en 2006 se presenta finalmente el Black Series en una tirada limitada a 130 unidades y con el objetivo de ser un gancho para el mercado asiático, que ya había sido tentado previamente con el no matriculable SLK Track Sport.

Perfil del SLK Black Series

Como ya comentábamos, este SLK perdía el techo retráctil en el afán enfermizo de mejorar la rigidez torsional y reducir el peso, sustituyéndolo por uno fijo de material plástico reforzado con fibra de carbono o CFRP, pero no se detenía ahí. Recibía nueva defensa delantera más ancha también en CFRP, varios añadidos aerodinámicos extra, nuevo subchasis delantero de aluminio...

La capacidad de frenada se aumentaba con un compuesto mejorado respecto al de serie pero que mantenía el tamaño del sistema del 55 AMG, con discos de 362mm y pinzas de seis pistones delante y 330mm y cuatro pistones detrás. Como novedad, ahora estaban rodeados por unas llantas forjadas de 19 pulgadas exclusivas del modelo. Lógicamente, esas llantas traían unos zapatos acorde al carácter del coche, unos semislicks de 235/35/19 y 265/30/19 en la trasera.

Las llantas forjadas eran clave en la reducción del peso del Black Series

El festival de piezas nuevas continuaba con una suspensión regulable, refrigeración extra para la caja de cambios AMG SPEEDSHIFT 7G-TRONIC con un nuevo radiador (más allá de las nuevas rejillas mencionadas), nueva bomba de dirección o un interior repleto de fibra de carbono presidido por dos buckets tan envolventes como espartanos.

Interior del Black Series

Finalmente, el aumento de potencia y par desde 360 CV y 510 Nm de origen a los 400 CV a 5750 rpm y 520 Nm a 4000 rpm del Black Series eran cosa de una nueva electrónica de control del motor, nueva admisión de mayor caudal y nuevo diseño de los colectores. Una remodelación exhaustiva que explica semejante ganancia en el V8 5.5 atmosférico.

M113, V8 atmosférico de 5.5 litros que ahora entregaba 400 CV

La interminable lista de cambios conseguía que el Black Series acelerase de 0 a 100 en 4,5 segundos y llegara hasta los 280 km/h, pero lo más reseñable quizás fuera su recién adquirida capacidad de track tool habiendo perdido por el camino 45 kg (1495kg) y sumando el efecto en la pista de sus nuevas armas. Todo un cohete de bolsillo de una era que parece lejana, de pequeños biplazas, grandes V8s e ideas locas.

De los 107000€ de tarifa en su momento para las poco más de 100 unidades vendidas -que son unos 140000€ actuales ajustando la maldita inflación-, hemos pasado a casi el doble; los 189000€ del único SLK 55 AMG Black Series que hemos encontrado a la venta en el siguiente enlace: pincha aquí.

Unidad a la venta de SLK Black Series

¿Es mucho? ¿Es poco? Eso tendréis que decidirlo vosotros, pero no nos podéis negar el aura especial que tiene este SLK cupé ultravitaminado y súper exclusivo.

Publicado el 
16/3/2022
 en
Coche de la semana